Cuba, isla de encuentros para las artes visuales en 2016

alina
04 January 2017 4:48pm
Cuba, isla de encuentros para las artes visuales en 2016

Como si fuese providencial destino, Cuba devino espacio predilecto para que artistas de allende los mares desembarcasen con sus más recientes creaciones durante todo 2016.

Algunos llegaron por su cuenta, mientras, otros, aprovecharon el contexto de grandes eventos culturales organizados en la nación antillana.

El fotógrafo francoargentino Sebastián Gil, ganador del prestigioso premio Sony World Photography Awards 2015, fue uno de los primeros en organizar un unipersonal en 2016, que tituló Cotidiano íntimo, una muestra con un marcado carácter social. 

La exhibición compiló varias reproducciones de sus fotos, especialmente enmarcadas en los barrios pobres de Río de Janeiro, Buenos Aires y Senegal, de las cuales emanaba una estética documental.

El año heredó además la exposición Momentos de la condición humana, del estadounidense Peter Turnley, que permitió recorrer disímiles sucesos históricos de las últimas cuatro décadas como la caída del Muro de Berlín, las protestas estudiantiles en China y la salida de Nelson Mandela de la prisión.

De acuerdo con el Museo Nacional de Bellas Artes, este acierto curatorial atrajo a más de 35 mil 600 visitantes cubanos y foráneos, al tiempo que significó un valioso aporte para la colección de la entidad, aumentada en 10 fotografías donadas por Turnley. 

En el quinto año del proyecto El Prado en las Calles, poco más de medio centenar de reproducciones de obras maestras de la colección del prestigioso museo español se exhibieron alrededor de la verja del Castillo de la Real Fuerza.

Con la anuencia de la importante pinacoteca, los calcos en tamaño natural permitieron al público apreciar las técnicas y trazos representativos de las escuelas española, italiana y holandesa en piezas de Velázquez, Goya Rubens, Murillo, Caravaggio, El Bosco, Durero y Rembrandt. 

Durante la avalancha provocada en marzo por The Rolling Stones, una fotógrafa del rock, la zimbabwense Jill Furmanovsky, aprovechó el suceso cultural para regresar a la capital cubana.

La artista le tomó la delantera al concierto de la legendaria banda británica, incluyéndose también en el programa de la Semana de la Música Británica con una exposición de fotos suyas en la Fototeca de Cuba.

Instantáneas tomadas a lo largo de su carrera y que tienen como centro a reconocidas figuras del mundo del rock como Paul McCartney, Led Zeppelin, Pink Floyd, Oasis o el propio frontman de los Stones, Mick Jagger. 

A propósito de la Fototeca, la institución celebró los 30 años de creada con la organización de coloquios, talleres y muestras extendidas hasta el Noviembre Fotográfico, evento que agrupó diversas exposiciones de autores cubanos y foráneos localizadas en galerías y centros culturales de la urbe habanera. 

El pintor y grabador estadounidense Frank Stella acudió igualmente al Museo Nacional de Bellas Artes para un conversatorio en el cual develó algunas de las constantes búsquedas que emprende con su obra, como el interés por capturar el movimiento y los sentimientos por medio del abstraccionismo.

En términos más referenciales, el Centro de Arte Contemporáneo Wifredo Lam selló la deuda expositiva con Lázaro Saavedra, Premio Nacional de Artes Plásticas 2014, al organizar la muestra Base/Superestructura.

La muestra ocupó diferentes niveles de la propia edificación en una clara recreación de su título e intenciones que luego se fragmentó en lienzo y pared, a modo de contradiscurso o referencia al eslabón entre la obra y el creador.

Más allá de los niveles en los que fue dividida, las intervenciones, instalaciones, pinturas y video incluyeron además la posibilidad de ser vistas como un recorrido por las diferentes etapas de su carrera. El centro de arte reservó otro período para la exposición colectiva La madre de todas las artes que derivó en una de las propuestas más atractivas de las artes visuales antillanas tanto por el encuadre, enfocado en la arquitectura, como por la cantidad de formas expresivas.

Esta propuesta articuló obras de más de 60 artistas cubanos y resultó plural en discursos, soportes y manifestaciones artísticas de la autoría de Adrián Rumbaut, Carlos Garaicoa, Alexandre Arrechea, Roberto Diago, Sandra Ramos, Inti Hernández y Arturo Montoto, entre otros.

 Asimismo, la Casa de las Américas acogió a otro creador estadounidense, el diseñador Emory Douglas, quién asistió para la inauguración de una muestra de sus carteles. 

Douglas visitó la capital cubana a propósito del segundo festival del cartel organizado en varias instituciones y centros culturales del 25 al 29 de abril, un evento dedicado a la mujer y su relación con esta manifestación gráfica.

El también militante de las Panteras Negras desembarcó en suelo antillano con una selección de las exhortaciones y aspiraciones ideológicas de ese movimiento, acentuadas en su mayoría en la figura de la mujer afroamericana como portadora de un discurso desafiante, contracultural, de autodefensa.

La misma institución cultural cubana presentó hacia los meses finales del año un centenar de retratos del chileno Jorge Brantmayer, contenidos en un ensayo fotográfico bajo el título de Muchedumbre.

Las dimensiones de las fotografías, 60 x 90 centímetros, devuelven una cabeza humana en una escala casi real; chilenos todos, de grupos, edades y deseos diversos. 

Suman casi tres mil los que se han puesto desde 2006 ante la cámara de Brantmayer, interesado por la evolución social de su país.

La primera Bienal de Diseño de La Habana reunió a más de 400 expositores cubanos y de otras nacionalidades en galerías, centros expositivos y espacios públicos de la ciudad con una selección de su quehacer profesional, proyectos, soluciones de diseños, así como publicidad para distintos productos y servicios en poco más de una decena de categorías.

El evento atrajo a tres maestros del arte contemporáneo internacional, Michelangelo Pistoleto, Jannis Kounelis y Anish Kapoor, para la inauguración, en un pretendido acontecimiento extraordinario, de sus más recientes exposiciones personales.

La muestra de Kounelis, de Grecia, se centró en el uso de los espacios, mientras la de Pistoletto, de Italia, resultó ser su primera exposición personal en Cuba a pesar de que ya había desarrollado aquí varias de sus acciones artísticas.

Kapoor, nacido en India y con residencia en Londres desde la década de 1970, cerró la tríada con cinco esculturas monumentales concebidas especialmente para la sede caribeña de Galleria Continua, desde la cual ya había hecho una de sus instalaciones durante la XII Bienal de La Habana en 2015.

  Para cerrar el año, el Premio Nacional de Artes Plásticas 2016 recayó en José Manuel Fors, en reconocimiento a sus aportes al desarrollo de las artes plásticas cubanas, especialmente desde la instalación y de la fotografía como soporte.

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