ExpoCaribe 2022 tiene que ser superior en todos los órdenes, aseguran organizadores
La edición 17 de la Feria Internacional ExpoCaribe, que se realizará el próximo mes de junio en Santiago de Cuba, busca superar lo alcanzado en su última edición de 2019, antes de la pausa obligatoria provocada por la Covid-19.
Autoridades de la Cámara de Comercio y del Ministerio del Comercio Exterior y la Inversión Extranjera evaluaron los preparativos de cara a ExpoCaribe, la segunda bolsa comercial más importante de Cuba, luego de La Habana.
Una de las motivaciones principales para esta edición de ExpoCaribe serán las cinco décadas de relaciones entre Cuba y la Comunidad del Caribe (Caricom), un hecho significativo en el acercamiento de las economías regionales en pos de avanzar a partir de circunstancias comunes y de los retos del desarrollo para dejar atrás las rémoras neocoloniales.
En el análisis de los preparativos se enfatizó en la necesidad de resolver los problemas enfrentados en el encuentro realizado hace tres años y de apostar por uno superior en todos los órdenes, uno de ellos, de importancia vital, la contratación de las transacciones, tanto nacionales como foráneas, reseñó PL.
Se abordaron aspectos relacionados con el alojamiento, la transportación, las regulaciones sanitarias y aduanales, la seguridad y protección, la programación diaria, las propuestas culturales y la acreditación.
Los organizadores informaron que se garantiza la traducción simultánea y los tres idiomas, español, inglés y francés, a tono con el panorama lingüístico del Caribe, lo cual se facilitará también desde los documentos principales.
Reconocida oficialmente por la Asociación de Ferias Internacionales de América (Afida), ExpoCaribe promoverá las carteras de oportunidades de las naciones participantes y los maridajes de productos, una opción muy eficaz para estos intercambios.
Serán atractivos del evento la Tumba Francesa La Caridad de Oriente, Patrimonio Oral e Inmaterial de la Humanidad; además del Castillo de San Pedro de la Roca del Morro y el Paisaje arqueológico de los cafetales franceses, ambos con la condición de Patrimonio Mundial.
