Planta de gasificación, importante acción del proyecto ambiental cubano
El año 2019 fue importante para la provincia cubana Pinar del Río, donde comenzó a funcionar la planta de gasificación de cáscara de arroz.
Perteneciente al Proyecto de Bases Ambientales para la Sostenibilidad Alimentaria Local (BASAL), con gran impacto en planes estratégicos del sector agropecuario, se debe a la iniciativa al Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), y a las contribuciones financieras de la Unión Europea y de la Agencia Suiza para el Desarrollo y la Cooperación (COSUDE).
Todos ellos enfocados en contribuir al auge socio-económico y ambiental, así como en apoyar la adaptación al cambio climático en el sector agropecuario, según especialistas en la materia.
Durante su intervención en el recién concluido III Taller anual de las Bases Ambientales para la Sostenibilidad Alimentaria Local, en ejecución en la Isla de 2012 a 2019, que sesionó en diciembre pasado en el Hotel Nacional de Cuba, el director de BASAL, Doctor en Ciencias Juan Mario Martínez Suárez, se refirió a otros proyectos inaugurados en igual periodo.
Así mencionó la puesta en marcha del nuevo Centro de reproducción de entomófagos y entomopatógenos (CREE) en Güira de Melena (Artemisa), o agentes de control biológico para combatir el ataque de plagas y enfermedades en los cultivos, la introducción del procedimiento metodológico para el ordenamiento ambiental en espacios marino-terrestres del archipiélago cubano.
El establecimiento de nueve fincas escuelas para la adaptación a las modificaciones climáticas, metodologías para la elaboración de programas y proyectos, así como la experiencia de las Brigadas de Uso y Calidad del Agua, son también acciones desarrolladas en 2019.
Por su parte Maribel Gutiérrez, Representante residente del PNUD y una de las personalidades extranjeras presentes en dicho encuentro, sugirió que la experiencia cubana puede implementarse en América Latina y El Caribe.
Al respecto dijo que para su organismo son vitales la puesta en marcha de la gestión del conocimiento, las buenas prácticas y la transferencia de tecnologías, como el caso de Cuba en su Proyecto BASAL, sobre todo en sus vecinos más cercanos del Caribe anglófono que tanto lo necesitan.
Finalmente, la funcionaria apreció el funcionamiento en la nación del Plan de Estado para el enfrentamiento al cambio climático o Tarea Vida, único de su tipo en el mundo.
