Moneda Cubana uno de los premios Excelencias bien merecidos

Los jóvenes entre 15 y 29 años constituyen el 21,7 por ciento de la población total en el Centro Histórico de La Habana Vieja, donde se destaca el Consejo Popular Catedral, formado por los barrios San Juan de Dios y Santo Ángel, zona priorizada para la conservación, uno de los más habitados, que sobresalen por sus valores urbanos, arquitectónicos culturales y creciente actividad  comercial y económica.

Los servicios gastronómicos desempeñan un rol protagónico por el considerable número de restaurantes y cafeterías y amplia demanda turística.

Es precisamente por estas cualidades de la comunidad y la existencia  de jóvenes desvinculados del estudio y del trabajo que surge el proyecto La moneda cubana. Premiado recientemente por el Grupo Excelencias con el Premio por la labor de rescate de valores en la comunidad y su concepción del desarrollo.

Excelencias News Cuba se entrevista con su Coordinador General para revelar algunos detalles interesantes acerca del proyecto y sobre la gratificación que fue para él este reconocimiento.

“El Premio Excelencias nos sorprendió, nos presentamos desde el año pasado, creemos que clasifiquemos- me dije- pero nunca pensé que lo fueran a otorgar. Es un alto reconocimiento porque es estar dentro de la Excelencia. En este sector es una gran responsabilidad para nosotros obtener un premio que se le entrega a personalidades, proyectos, etc… es de gran mérito para hacer las cosas mejores. ¡Agradecemos muchísimo este premio!- declaró.

La Moneda Cubana inserta dentro de sus actividades sociales en el barrio: La campaña anti vectorial, el aporte de 400 donaciones de sangre, trabajos voluntarios, prestación de servicios gastronómicos a centros, instituciones, círculos de interés en escuelas primarias, organizaciones locales, casas de abuelos; 95 jóvenes se han incorporados a la UJC, 75 a la Facultad Obrera Campesina además de 127 jóvenes en el Club juvenil martiano creado por el proyecto.

“Este premio otorgado inspira aún más a colocar el conocimiento como eje fundamental para la transformación sociocultural y económica del territorio y aporta a las estrategias del gobierno dirigidas a la atención de los muchachos vinculados a la conservación y promoción del patrimonio de la identidad cultural, elevación, calidad de los servicios y al fortalecimiento del trabajo comunitario como guía para la formación de los valores sociales”. Señaló Ángel

Hasta la fecha se han graduado 150 talleristas que experimentaron cambios de conducta, opiniones y actividades individuales y colectivas, además propició el reconocimiento  social por parte de las familias, dueños de paladares y comunidad.

Otros premios internacionales han sido otorgados  al valorar el impacto: International Quality Crown de Londres (2013); El International Quality Summit de New York, la European Society Quality Research de Bruselas, el Best Quality Leadership Award de Las Vegas (2014), el World Business LeadernThe Bizz de Atenas y el International Diamond Prize or Excelence in Quality de Viena (2015). Entre otros nacionales ha obtenido la Medalla  por el 50 Aniversario de  la UJC.

Se espera para el próximo curso, en septiembre, una matrícula de casi 400 estudiantes, sumando un total de mil estudiantes de quince municipios incluyendo  las provincias de Mayabeque y Artemisa.

Nuestro entrevistado recalcó que otros jóvenes que no estén desvinculados también pueden insertarse. “…Hemos abierto varias modalidades por la gran demanda, independientemente de que nuestro objetivo es insertar a los desvinculados. Tenemos casi 80 trabajadores incorporados, entre 25 y 40 años, que siempre han querido aprender a cocinar y saber cómo colocar los platos en la mesa, tratar de incentivar estos hábitos en la familia cubana es muy gratificante. Se les da toda la documentación y audiovisuales necesarios para que estudien autodidactamente y  luego se les examina para reconocer lo estudiado”.

“Muchos restaurantes y paladares que crecen como negocios de familia necesitan estos cursos. Existen 25 en la capital que forman parte del programa (La Barraquita de La Habana, La Divina Pastora, La Terraza de Obispo, Bar restaurante Van Van, Calesa Real, Café Ajiaco, Hostal Calle Habana… son fuentes de empleos hacia restaurantes y paladares, generando  más de 150 opciones para crecer en la calidad de los servicios y los negocios”.

Se anuncia que dentro de tres meses, se inaugurará en la propia escuela, sita en San Ignacio, la primera Biblioteca Especializada de Cocina Cubana, con libros y documentación donados por colaboradores y Chefs españoles. “Agradezco el apoyo también de la Embajada de España, Plan maestro, UJC, Consejo Popular Catedral, paladares, Havana Club y demás entidades, para  que este proyecto fuera posible”, recalcó.

“Abriremos cursos en septiembre dedicado al arrendamiento y daremos cursos para jóvenes que le interesen aprender sobre hospedaje, atención a clientes, camareros, etc...”.

La Moneda Cubanadata desde 1924, fue la primera casa de víveres y licores que funcionaron como un negocio para el comercio, cierra sus puertas en 1962 tras un proceso de reordenamiento estructural del país y reabre en el 2011.

Ángel cuenta una anécdota sobre el surgimiento de este proyecto que bien merece la pena destacar: Él, al ocupar el cargo de Delegado de esa circunscripción y tras la problemática de jóvenes desvinculados en ella,  el dueño de la Moneda Cubana (Empedrado 152 esq. Mercaderes), Sr. Miguel Ángel Morales  le permitió preparar a esos muchachos desvinculados para ofrecerle trabajo en su propio establecimiento, donde se impartirían las clases de 8 de la mañana a 12 de día y a partir de ese horario brindaría el servicio gastronómico.

“Fue la primera persona que confió en este proyecto y es por ello que se convirtió en la primera aula que tuvieron los jóvenes. En honor y agradecimiento a este gesto, el proyecto lleva el nombre La Moneda Cubana.