Medidas migratorias de Trump siembran incertidumbre sobre vuelos entre EE.UU. y Cuba

Una orden ejecutiva del presidente Donald Trump ha encendido las alarmas en la industria aérea, al imponer nuevas restricciones de visado a ciudadanos de varios países, incluida Cuba, lo que podría afectar directamente la demanda de vuelos y llevar a una reducción de servicios entre la isla y Estados Unidos.
Aunque otras naciones incluidas en la medida, como Burundi o Laos, no tienen rutas aéreas activas con EE.UU., Cuba mantiene más de 12,800 vuelos programados este año con un total de más de 2 millones de asientos, según datos de la firma Cirium. Las aerolíneas operan con mayor intensidad en marzo y diciembre, siendo estos los meses de mayor tráfico entre ambos países.
American Airlines es el operador con mayor presencia en la isla, con más de 9,300 vuelos programados y 1.46 millones de asientos en 2025. Desde el Aeropuerto Internacional de Miami, la aerolínea conecta con seis ciudades cubanas: La Habana, Camagüey, Holguín, Santiago de Cuba, Santa Clara y Varadero, beneficiándose previamente de las flexibilizaciones bajo el gobierno de Joe Biden.
Otras aerolíneas estadounidenses con operaciones en Cuba son Southwest, con más de 1,450 vuelos entre Tampa y La Habana; Delta, que ofrece 1,460 vuelos entre Miami y La Habana; y United, con 626 vuelos desde Houston. Sin embargo, en 2023, JetBlue, Delta y United ya habían reducido o eliminado rutas debido a la caída en la demanda tras cambios regulatorios.
La nueva política de Trump podría representar un nuevo golpe para la conectividad aérea entre Cuba y EE.UU., en especial si dificulta aún más la obtención de visas por parte de los viajeros cubanos. Las aerolíneas podrían verse obligadas a ajustar su capacidad si se repite el patrón de reducción de pasajeros observado en años anteriores.
En el caso de Haití, incluido en la lista de países con suspensión total de visados, la situación es aún más crítica. Desde que en 2023 tres aviones fueron alcanzados por disparos en el aeropuerto de Puerto Príncipe, la FAA prohibió los vuelos estadounidenses al país. Actualmente, Sunrise Airlines es el único operador activo desde Cap-Haïtien a Miami, con 1,078 vuelos programados y capacidad para 171,840 pasajeros.
Las aerolíneas estadounidenses aún mantienen sus operaciones hacia Cuba gracias al contexto más flexible heredado de la administración Biden, pero el panorama podría cambiar rápidamente si las nuevas restricciones generan una caída abrupta en la demanda.
Aunque aún no se conocen los efectos concretos de esta política, la industria aérea sigue de cerca la evolución de la situación, evaluando su impacto sobre la rentabilidad de rutas y la viabilidad de mantener servicios hacia un destino cada vez más incierto.