Guardalavaca se mantiene libre de sargazos
En un escenario mundial marcado por crisis ambientales y la proliferación del sargazo en numerosas playas, Guardalavaca, ubicada en la costa atlántica de Cuba, en la provincia de Holguín, conserva su imagen de paraíso natural con arenas blancas y aguas cristalinas.
El doctor Ridel Rodríguez Paneque, jefe de Gestión Costera del Centro de Investigaciones de Servicios Ambientales y Tecnológicos (Cisat), explicó a la Agencia Cubana de Noticias que este resultado responde a una geografía privilegiada. La zona cuenta con una defensa natural que impide la llegada de esa plaga al litoral norte.
El especialista señaló que algunos visitantes podrían confundir la vegetación autóctona con sargazo. Sin embargo, se trata de especies propias de la región, como la malasia fectilino y la uva caleta, que cumplen ciclos reproductivos específicos y forman parte esencial de la biodiversidad que requiere protección.
Rodríguez Paneque destacó que el equipo del Cisat, subordinado al Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente de Cuba, trabaja en la recuperación de las playas como ecosistemas con características propias. En Guardalavaca, esa política ambiental se refleja en el compromiso de los trabajadores de los complejos hoteleros, quienes realizan recogidas constantes de arena y materia orgánica que las especies endémicas aportan al descomponerse, elementos vitales para que los ecosistemas enfrenten los efectos del viento.
El hotel Gran Muthu Almirante Beach integra estas acciones en su rutina diaria. Su director general, José Ramón Santana Rivero, explicó que el cuidado del entorno incluye la limpieza del balneario, el uso de productos biodegradables en los servicios gastronómicos y la transformación de desechos comestibles en abono natural para la ornamentación del recinto. Señaló que el objetivo principal consiste en conservar el tesoro natural que poseen y que los propios visitantes respaldan mediante el reciclaje de plásticos, vidrio y metales, depositados en contenedores especializados para mantener la pureza de la arena.
El hotel Starfish Guardalavaca sigue la misma línea de trabajo. Su colectivo fomenta el reciclaje y sensibiliza a los clientes sobre la importancia de estas prácticas, consideradas tareas de impacto para la sostenibilidad. Grace Arellano, directora de la instalación de tres estrellas perteneciente a Blue Diamond Resorts, afirmó que priorizan el reciclaje y la reducción de desechables. Además, un equipo especializado limpia el entorno desde las primeras horas de la mañana para garantizar aguas turquesas y arenas finas que atraen a los visitantes.
El Club Amigo Atlántico Guardalavaca, con más de tres décadas de servicio, se distingue por su compromiso ambiental y la protección de la playa como principal recurso turístico. Su director adjunto, Lenar Andrés Concepción Romero, explicó que han fomentado la conciencia ecológica también en los huéspedes mediante actividades temáticas. Dentro de su plan de acciones incluyen un día verde semanal, en el que promueven la siembra de árboles, el cuidado de la playa y la divulgación de las especies naturales presentes en la zona, como forma de combinar vacaciones con protección del ecosistema.
Guardalavaca, en el oriente cubano, se reconoce por sus aguas cálidas y por un extenso arrecife de coral que favorece el desarrollo turístico en toda su costa. Ese entorno convierte a la playa en uno de los destinos preferidos por visitantes nacionales y extranjeros.




