Roman Vytovtov, un enamorado del buceo y de Cuba

Roman Vytovtov ha encontrado la forma de unir estas dos pasiones en un proyecto que desde 2021 da sólidos pasos: la creación de sendos clubes de buceo ruso-cubanos en los polos turísticos de Varadero y Cayo Coco.
Para el director de la empresa Siberian Diving, la isla caribeña tiene muchas potencialidades por explotar en relación con el mercado ruso, que tiene en alto valor a la región del Caribe para la práctica de este deporte, por la transparencia de sus aguas y la diversidad biológica de sus fondos; además de contar con muchos tesoros inexplorados que mostrar al mundo, como sus excelentes cenotes y cavernas.
Sobre este y otros temas dialogamos con el experimentado instructor de buceo.
—El pasado mes de abril se concretó un acuerdo entre la Empresa Marinas y Nautica Marlin S.A. de Cuba y Siberian Dive para la apertura de dos centros de buceo con certificación NDL (National Dive League/Liga Nacional de Buceo), en los polos turísticos de Varadero y Cayo Coco. ¿Podría hablarnos más de este particular?
—Sí, efectivamente, el pasado mes de abril se firmó un contrato entre Marlin y Siberian Diving, para abrir dos centros de buceo ruso-cubanos. Empezamos a trabajar en este contrato en la primavera de 2019. Los tiempos de pandemia han contribuido a la lentitud del proceso de desarrollo del contrato. Pero a pesar de los diversos obstáculos, realizamos un gran volumen de trabajo y el resultado fue este contrato.
El objetivo de abrir centros de buceo ruso-cubanos es que los turistas de habla rusa que vienen a Cuba puedan obtener información precisa sobre el buceo sin la barrera del idioma. Es decir, el centro de buceo debe emplear a profesionales que hablen ruso. Porque mucho depende de la información que proporcione el instructor al turista, de los aspectos que implica la inmersión. Si la inmersión transcurre con seguridad y comodidad, al cliente le gusta, y vuelve de nuevo, ¡quiere repetir! Además, se lo cuenta a sus amigos y ellos también quieren venir a bucear a Cuba.
Por lo tanto, es importante asegurarse de que en su primera inmersión tenga una buena experiencia y que entienda que se le cuida y que se respetan todas las normas de seguridad.

—¿Cuándo tienen pensado que estén operativos?
—Ahora estamos trabajando en modo de prueba. Estamos elaborando todos los documentos adicionales. Estamos esperando un gran contenedor con nuevos equipos. Cooperamos activamente en diferentes temas con la empresa Marlin y el Ministerio de Turismo de Cuba. Los especialistas de estas organizaciones están deseosos de ayudarnos y de ayudar a resolver diferentes cuestiones. ¡Un gran agradecimiento para ellos!

—El mercado ruso ha experimentado un auge significativo en los últimos cinco años en el Caribe. ¿Considera esta una buena oportunidad para la promoción de la actividad de buceo en el país?
—El Caribe siempre ha sido conocido por sus aguas transparentes para el buceo, una gran variedad de flora y fauna submarina. Tanto los principiantes como los buzos experimentados siempre están interesados en venir aquí. Depende mucho de la infraestructura y la profesionalidad del anfitrión. Si se crean condiciones cómodas para los turistas, siempre volverán. El sector del buceo se desarrolla y crece cada año. El destino caribeño es muy interesante para la exploración submarina. Hay muchas cosas que ver: pequeños peces de colores y grandes animales, sorprendentes barreras y hermosos cenotes/cuevas.
Por tanto, si se prestan servicios profesionales y de calidad, el flujo de turistas no hará más que aumentar.
—Cuba cuenta con fondos marinos muy bien conservados y zonas de mucho interés para el espeleobuceo y otras modalidades. ¿Cómo valora las potencialidades del país para la promoción de esta actividad turística, que en el caso del mercado ruso ha tenido tradicionalmente otros receptores más cercanos?
—El potencial del buceo en Cuba es enorme. Más de 6.000 turistas rusos vienen a Cuba cada semana. A muchos de ellos les gustaría probar el buceo.
Pero la falta de información, la escasa infraestructura, la falta de profesionales de habla rusa, hace que muchos turistas abandonen el país, ¡sin probar lo que es el buceo! Y tienen el deseo. Créeme.
Un tema aparte son las cuevas/cenotes de Cuba. Es fantástico bucear en agua dulce y salada, el juego de la luz - sensaciones inexpresables. Todos los que pudieron sumergirse en los cenotes cubanos, ¡todos se llevaron una carga de emociones e impresiones positivas! Los cenotes cubanos no son inferiores a los conocidos y bien publicitados cenotes mexicanos. Pero están poco explorados en Cuba y no hay mucha infraestructura en torno a ellos. Por eso estamos trabajando en un nuevo proyecto para estudiar las cuevas cubanas. Queremos invitar a todos los instructores de cuevas más conocidos del mundo a unirse al proyecto. Deberían investigar y luego contar al mundo entero esta maravilla de Cuba.
—¿Por qué Varadero y Cayo Coco para la apertura de estos centros? ¿Tienen perspectivas de abrir en el futuro, similares en otros puntos de la geografía del país?
—Por supuesto, pensamos abrir un centro de buceo en Varadero, porque allí hay un gran flujo de turistas y necesitan diferentes actividades.
Cayo Coco tiene un montón de sitios de buceo interesantes y es el centro de la isla desde donde se puede ir a otros sitios de buceo.
Ahora estamos negociando con Cubanacan para abrir un centro de buceo, en los terrenos de su hotel, en la zona del Mar Caribe.

—¿Tiene Siberian Diving negocios o proyecciones de ello con otros destinos de la región igualmente atractivos para el buceo y posicionados en el mercado ruso?
—Somos profesionales en nuestro campo. Es muy difícil ser profesional en muchos ámbitos al mismo tiempo. No estamos acostumbrados a hacer trabajos de baja calidad. Por lo tanto, es probable que solo hagamos lo que hacemos bien. ¡Eso es bucear! Sobre todo porque el buceo en Cuba es estupendo y tiene grandes perspectivas de desarrollo.
—En un aspecto más personal, el buceo es para la mayoría de quienes lo practican o ejercen de manera profesional una pasión. ¿Es el caso de Roman Vytovtov? ¿Qué le atrajo de Cuba y cómo la recomendaría a los apasionados de este deporte?
—Por supuesto, me gusta mucho el buceo, ¡sobre todo porque estoy metido en él desde 1984! Todavía disfruto descubriendo nuevos lugares para bucear. Me gusta mucho el buceo en cuevas. Por eso soy instructor de buceo técnico e instructor de FullCave.
Fui a Cuba por primera vez en 2006 e inmediatamente me enamoré del país. Porque Cuba no es solo buceo, tiene hermosos paisajes tanto de mar como de montaña y el activo más importante de Cuba, en mi opinión, es su gente, ¡los residentes locales! A pesar de las dificultades de la vida, estas personas nunca se desaniman y siempre bailan y cantan. ¡Esto da un impulso muy grande de energía positiva a los que vienen a Cuba y realmente la conocen y conocen a los lugareños! ¡VIVA CUBA!