Matanzas, Varadero y el turismo post Covid-19

Medios
12 May 2020 1:17pm

Sin lugar a dudas, y con disímiles paraísos en Cuba, Varadero es el destino preferido por millones de turistas que cada año visitan la isla caribeña. Perteneciente a la provincia de Matanzas, y ya sea que lo visiten por vez primera o que lo repitan en sus planificadas vacaciones, lo cierto es que son muchas las personas que se sienten atraídas por una de las playas más hermosas y mejor conservadas, que cuenta con 52 hoteles y un activo crecimiento de su planta habitacional.

El turismo, un pilar fundamental para la economía cubana, continúa siendo uno de los sectores más afectados por la pandemia del nuevo coronavirus a nivel mundial. En Cuba, sus instalaciones hoteleras y extrahoteleras permanecen cerradas, así como el resto de los servicios, estatales o privados que trabajaban para el sector, desde hace ya unos dos meses y medio.

Pese a ello en la provincia, y específicamente en Varadero, aunque los hoteles no reciben vacacionistas, el trabajo continúa. Allí, cumpliendo las medidas higiénico-sanitarias orientadas, se utiliza este tiempo de pausa obligatoria para fortalecer cuestiones de mantenimiento, que prepara el escenario para el retorno a la normalidad del turismo con una visión determinada por la crisis.

Y es que, una vez que reabran hoteles, bares y restaurantes, los clientes no serán iguales, aunque sean los mismos. Habrán experimentado un significativo cambio de actitud; serán mucho más sensibles a las cuestiones relacionadas con la higiene, la limpieza, las desinfecciones; y no los podremos culpar. El coronavirus no habrá cambiado a todos; y todos estaremos temerosos de un rebrote de la enfermedad, como vaticinan expertos.

Unos se muestran optimistas y prevén el regreso de los viajes y el movimiento turístico para el último trimestre del año; otros son más pesimistas o reservados, y hablan de hacerlo a principios de 2021.

Sea como fuere, hay que estar preparados y para ellos es “fundamental contar con programas y protocolos de seguridad e higiene para atender correctamente a los clientes y llevar confianza en momentos de crisis según plantean autoridades del sector en la provincia, pues consideran que los vacacionistas elegirán sus destinos no solo por los atractivos naturales, culturales y el confort, sino también y sobre todo, por el grado de limpieza y bioseguridad que estos puedan ofrecerles.

Actualmente, los planes y control de la calidad donde la higiene siempre ha desempeñado un rol preponderante, están obligados a elevar sus protocolos en cuanto al nivel de desinfección de las instalaciones; y en tal sentido, expertos a nivel mundial sugieren la creación de un sello que certifique aquellos establecimientos que están haciendo un esfuerzo mayor en cuanto a las medidas para prevenir el contagio por coronavirus.

Las estrategias para la comercialización vía internet y desde las agencias de viaje, deben demostrar las medidas de limpieza y distanciamiento social en los espacios comunes de los hoteles.

Si bien recientemente el ministro cubano de Economía y Planificación, Alejandro Gil, habló de una proximidad a la fase de recuperación en el país, aún no es posible precisar en qué momento retornará el turismo a Cuba y a Varadero. Quizás cuando superemos el coronavirus o tal vez cuando aprendamos a convivir con él. Lo cierto es que sea cuando sea, será con cambios tanto en lo personal como a nivel de países.

Mientras tanto, el turismo, como motor impulsor de las economías, y en este caso en Cuba, precisa revolucionarse, reinventarse, modificarse, en aras de mantener su privilegiado espacio en el mercado internacional.

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