Un verano de extremos

Sí, un verano de extremos, al menos creo que es el calificativo mejor parecido para los acontecimientos que han tenido lugar en esta última semana en los continentes, en verano, del Hemisferio Norte de la Tierra.
En primer lugar, podemos hablar de las olas de calor simultáneas que golpean el hemisferio norte en este verano, como bien lo ha calificado la Organización Meteorológica Mundial (OMM) desde su sede en Ginebra, que ha sido fuente de la mayor parte de las cifras mostradas en este trabajo.
En efecto, se han batido nuevos récords diarios y de temperatura en estaciones y es posible que algunos récords nacionales también caigan en los próximos días. El pasado mes de junio dejó la temperatura promedio global más cálida registrada, que continuó en julio, según cifras preliminares.

También ha habido fuertes lluvias con inundaciones devastadoras y pérdida de vidas en algunos países, incluida la República de Corea, Japón y el noreste de los Estados Unidos.
Las olas de calor se encuentran entre los peligros naturales más mortales en los continentes, con miles de personas que mueren por causas relacionadas con el calor cada año, dijeron expertos de la OMM en una conferencia de prensa el pasado 18 de julio.

Grandes partes del norte de África, el Mediterráneo, Asia y el sur de los Estados Unidos de América se han visto afectadas. El servicio meteorológico estatal español AEMET advirtió de temperaturas de entre 42 ° Celsius y 44 °C y emitió alertas rojas de alto nivel para algunas partes del interior del país y las Islas Baleares.
El servicio meteorológico nacional de Italia también emitió alertas rojas por calor extremo en el sur de Italia, Sicilia y Cerdeña, con temperaturas muy por encima de los 40°C. Partes de los Balcanes también están bajo alerta roja.
Se prevé que el calor se intensifique en estos días en partes del Mediterráneo, incluidas Grecia y Turquía.
Las temperaturas máximas más altas registrada en Europa ha sido de 46.3 ºC en Licata, sur de Italia, seguida de Riese con 45.8 ºC en el mismo País. En España, Figueres y Porqueres, ambas en Cataluña, han registrados 45.4 y 44.3 ºC, respectivamente, mientras que en Andalucía, Granada registraba una máxima de 43.3 ºC.
En Francia, en los Pirineos Orientales y a una altura de 700 metros sobre el nivel del mar, Serralongue registraba 40.1 ºC, rompiendo su récord histórico de 37.0 °C obtenido el 22 de agosto de 2012.
Como consecuencia de las altas temperaturas y la sequedad de esta ola de calor, los incendios forestales también han estado a la orden del día en las Islas Canarias, Sicilia, Cerdeña y en Grecia, donde aún se combaten las llamas.
Atas temperaturas también se registran en el Norte de África, El pasado 16 de julio, oscilaron entre 38 ° C y 47 ° C en las áreas central y norte de Marruecos.
No solo las temperaturas están altas por el día, sino también de noche, las que están por encima de la media, lo que puede continuar en agosto.
Pero esta situación no es privativa de Europa y del Norte de África, sino también en otros continentes que están en verano en el hemisferio Norte. Por ejemplo, en América del Norte el fin de semana del 15 y 16 de julio, las advertencias de calor excesivo cubrieron a más de 100 millones de personas con "calor peligroso y sofocante", especialmente en gran parte del oeste de los Estados Unidos. En Furnace Creek, en el Parque Nacional del Valle de la Muerte en California, se registró 53.3 ° C el pasado domingo 16 de julio. Según el Archivo de Fenómenos Meteorológicos y Climáticos Extremos de la OMM, la temperatura más alta jamás registrada en el Mundo ocurrió precisamente en ese lugar, Furnace Creek, con 56,7 ° C el 10 de julio de 1913.

Pero cruzando el océano Pacífico, también nos encontramos con el calor. La estación meteorológica de Sanbao, en la ciudad de Turpan, en la provincia china de Xinjiang, tuvo una temperatura de 52,2 ° C, también el pasado domingo 16 de julio, estableciendo un nuevo récord nacional de temperatura en China según un informe de la Administración Meteorológica de ese país. El récord anterior en China, registrado en 2015, fue de 50,3°C.
