Frank Fernández regalará un mismo concierto a Cuba y Estados Unidos

El relevante pianista cubano Frank Fernández debutará en Estados Unidos a los 71 años de edad pero, pese a la emoción que el suceso le depara, el maestro compartirá antes el mismo programa musical con el pueblo de Cuba, donde una legión de admiradores abarrota sus conciertos.
La Basílica Menor de San Francisco de Asís, localizada en la plaza homónima del centro histórico de La Habana, acogerá el próximo 16 de julio el espectáculo único donde el intérprete tocará obras de Bach, Beethoven, Chopin, Lecuona y de su propia autoría la popular Suite para dos pianos. Esta última composición consta de cinco temas: Bolero, Vals Joropo, Conga del mediodía, Habaneras y culmina con Zapateo por derecho, una pieza de particular brillo por su demanda de virtuosismo y ritmo.
“Yo inauguré la Basílica en 1998 y se ha convertido en la sala más importante de conciertos en el país, por eso me da tremendo orgullo tocar casi siempre allí”, aseveró Frank, considerado por varios especialistas en arte como el padre de la escuela pianística cubana pues sus discípulos, sin asistir a conservatorios extranjeros, han conquistado 27 premios internacionales.
El maestro es uno de los grandes defensores del genial pianista cubano Ernesto Lecuona, cuyas piezas acostumbra a introducir en sus conciertos en los más diversos escenarios del mundo. Para la ocasión, según precisó, interpretará cinco danzas, entre ellas La negra bailaba, Malagueña y La comparsa.
También incluirá en el programa algunos valses de Chopin y una de las más famosas sonatas de Beethoven, la número 21 en Do Mayor, Opus 53, conocida mundialmente como Aurora por transmitir impresiones del compositor sobre la naturaleza.
“Este concierto es la antesala del que ofreceré en un par de semanas en el Festival de Ravinia, Chicago, el más grande al aire libre de los celebrado en Estados Unidos. Pero mi pueblo no es menos, así que antes se lo voy a regalar”, comentó el intérprete.
La emoción en tierra norteamericana promete ser grande pues varios de sus familiares emigrados podrán verlo por primera vez actuar en vivo.
“Uno de los días del festival voy a tocar además en la sala elite, que es para unas 450 personas aproximadamente, y tengo tantos parientes en Estados Unidos que la mitad de la sala ya está vendida con la familia”, bromeó muy entusiasta el artista.
El pasado 3 de julio, Fernández presentó en el Cine Charles Chaplin de La Habana un videoarte realizado a partir de una composición musical suya en homenaje a la legendaria bailarina cubana Alicia Alonso, bajo la dirección audiovisual del cineasta Alejandro Pérez, una coreografía de Tania Vergara y la interpretación de la primera figura del Ballet Nacional de Cuba Viengsay Valdés.
“Frank y Alejandro caminaron poéticamente por los peldaños del ballet, mientras Viengsay era como la luz de Alicia”, exclamó el gran cantante puertorriqueño Danny Rivera al concluir la proyección.
Críticos de varios continentes elogian el virtuosismo del Frank Fernández graduado con título de oro en el Conservatorio Chaikovski de Moscú, y hasta el momento, el único cubano que ostenta la Medalla Pushkin, otorgada directamente por el presidente de Rusia, Vladímir Putin.
Para algunos es “un ser tocado por la divinidad”, otros resaltan su potencia en el piano y la mayoría coincide en catalogarlo como uno de los magistrales intérpretes de los momentos más sublimes de la música universal y por tanto, uno de los pianistas más grandes del mundo.
Con más de 200 premios en el currículum, Fernández tiene ganado prestigio de músico versátil pues sus composiciones sobrepasan las 650 en diferentes formatos: ballets, coros, bandas sonoras para cine, radio, televisión y arreglos para agrupaciones de música popular.
El 1 de julio anterior, estudiantes de la Escuela Nacional de Ballet de Cuba Fernando Alonso bailaron en el Centro para las Artes Ruth Page, de Chicago, dos coreografías del maestro estadounidense Pedro Ruiz: Tres estados del alma y Lugar de verano, ambas con música del laureado pianista cubano. Los aplausos para Frank no cesan.