Marcha atrás: cero ligas caribeñas para peloteros cubanos
La variante que permitiría insertar a beisbolistas cubanos en las ligas invernales del Caribe, exceptuando la boricua, fue desestimada precisamente porque Puerto Rico no quiere quedarse fuera de esta ansiada posibilidad.
El dominicano Juan Francisco Puello, presidente de la Confederación de Béisbol del Caribe, había anunciado la semana pasada que a partir de la próxima temporada los cubanos podrían jugar en los torneos profesionales del Caribe tras un acuerdo con Major League Baseball (MLB), menos en la Isla del Encanto, por ser territorio de Estados Unidos.
Se abría así una puerta geográfica y culturalmente inevitable para los peloteros cubanos, que gracias a las nuevas políticas de contratación del Instituto Nacional de Deportes (INDER) ya estaba en las Grandes Ligas de Japón y en el campeonato profesional de México.
Pero el presidente de la Liga Puertorriqueña de Béisbol Profesional Roberto Clemente, Héctor Rivera, protestó contra una opción que los afectaba. En carta a Puello, Rivera reafirmaba que todas ligas invernales deben ser tratadas iguales y que ninguna medida puede beneficiar a unas sobre otras. “Que quede claro que en Puerto Rico no tiene nada contra los hermanos cubanos. Con la carta no pretendemos ofenderlos a ellos, ni a ninguna otra de las ligas invernales del Caribe. Solo queremos que las Grandes Ligas no nos discrimine”, enfatizó.
En su misiva, Rivera reseñaba una serie de tales casos de discriminación, desde la inclusión de Puerto Rico en el sorteo de novatos de las Grandes Ligas, pasando por el Clásico Mundial y su nueva variante, el Premier 12, convocados en pleno campeonato invernal, que sufre así la ausencia de figuras de primer nivel.
La solución, exige Rivera, es que Cuba sea finalmente miembro de la Confederación de Béisbol del Caribe, con plenos derechos y deberes que le permita, entre otras cosas, prescindir del status de invitado para disputar la Serie del Caribe.
Puello entendió la posición de Puerto Rico, y dio marcha atrás a la medida, sin que la parte cubana se haya pronunciado oficialmente. No obstante, la Federación Cubana de Béisbol busca nuevos mercados para sus jugadores, entre ellos veteranos de buen ver como el antesalista Michel Enríquez, de regreso a México.
Más allá del béisbol, deportes como el voleibol y baloncesto también abren puertas al desarrollo y la realización económica, deportiva y espiritual de los talentos que abundan en este país. Por ejemplo, Rolando Cepeda y Javier Izquierdo jugarán en el PAOK griego de voleibol, y los baloncestistas Jasiel Rivero y Javier Jústiz se incorporaron a equipos de Uruguay y Argentina, respectivamente, con contratos precursores.