Shaquille O’Neal, otra exestrella de la NBA en La Habana

Otra leyenda del baloncesto estadounidense, Shaquille O’Neal, desembarcó en La Habana como parte de la fiebre que se ha desatado en Estados Unidos con Cuba desde diciembre del 2014, no solamente en el mundo del deporte.
En la popular cancha de 23 y B, en el Vedado capitalino, donde mismo estuvieron previamente Steve Nash y DikembeMutombo, el gigantón de 2.16 metros de altura confesó a Excelencia que lo suyo no es algo momentáneo, sino un sueño acariciado desde hace tiempo.
Tras ofrecer una clínica de su especialidad con un grupo de niños y jóvenes practicantes, como parte de un programa para promover la cooperación y el compromiso entre ambas naciones, Shaq se mostró orgulloso por estar en la mayor de las Antillas.
“Estar aquí como embajador del deporte es una oportunidad única y doy las gracias al pueblo cubano por recibirme y permitirme compartir algo de mis conocimientos del baloncesto con ellos”, afirmó rodeado de más de una decena de cámaras de diferentes medios de prensa, y alrededor de una veintena de periodistas.
O’Neal, actualmente con 44 años de edad,llegó el sábado a la isla y en su agenda de dos días participó en otras clínicas deportivas con niños y jóvenes, entre ellas una en la Universidad del Deporte cubano, y sostuvo reuniones con dirigentes deportivos cubanos.
“Espero que estas clínicas ayuden a formar jugadores y mejorar el baloncesto en Cuba. Me encantaría ver que uno de estos niños o jóvenes que tenemos aquí algún día llegue a jugar en la NBA”, señaló el expívot, que ganó cuatro títulos con Miami Heaty Los ÁngelesLakers.
Se trata de palabras mayores, pues tan solo dos jugadores cubanos han disputado partidos en la NBA: Andrés Guibertpara Minnesota Timberwolves entre 1993 y 1995, y Lázaro Borrell para los desaparecidos Seattle Supersonicsen la temporada 1999-2000.
“Amo a Cuba y a su gente, por eso es muy bueno que a través de deportes como el béisbol, el fútbol y baloncesto, sea una realidad este acercamiento entre ambas naciones”, dijo en otro momento.
El gesto fue muy agradecido tanto por los niños presentes como por exjugadores caribeños, como Judith Hernández, exintegrante del equipo nacional femenino: “Tener este tipo de jugador aquí es muy importante para el desarrollo del deporte. Él es el mejor pívot de la historia en el baloncesto y agradecemos que venga a Cuba”.
Fueron casi dos horas en las que el monarca mundial de Toronto-1994 y olímpico de Atlanta-1996 hizo de todo, hasta bromear con su célebre ineficacia en los tiros libres, o actuando como árbitro, explotando su veta de actor y comediante.
O’Neal jugó durante 19 temporadas en distintos equipos de la NBAy fue elegido 15 veces para el Juego de las Estrellas durante su dilatada carrera, por la que pasó por los equipos Orlando Magic, Los ÁngelesLakers, Phoenix Suns, Cleveland Cavaliersy Boston Celtics.
Miembro del Salón de la Fama del baloncesto, actualmente es el séptimo máximo anotador de la historia de la NBA con 28 mil 596 puntos, yes considerado el pívot más dominante en la historia de esta disciplina.
Durante su estancia en el país, O’Neal también visitó sitios culturales deimportancia histórica en La Habana, donde pudo constatar que no es un desconocido, pues la gente le preguntaba por su pasado como jugador y sus antiguos compañeros Kobe Bryant y DwayneWade.