San Pedro del Mar: El mirador del Caribe

La sureña ciudad de Santiago de Cuba, urbe donde se acunaron el bolero y la trova, lugar donde el caminante, atraído por sus encantos, vuelve una y otra vez al reencuentro con su gente alegre, dicharachera y orgullosa de haber nacido entre lomas y montañas, y donde lo viejo se entrelaza con lo nuevo para dar la bienvenida al visitante.

Uno de los lugares que distingue la metrópoli es el cabaret San Pedro del Mar, instalación que desde su surgimiento hace casi 66 años cuenta con ganado prestigio dentro y fuera del país.

Emblemático también por su historia

El cabaret, fue fundado el 13 de septiembre de 1950, y próximo a cumplir 66 años, según reflejan algunos documentos consultados, en éste emblemático lugar, el 25 de julio de 1953, en la víspera del asalto al cuartel Moncada, y en acto de agradecimiento a los santiagueros, quienes lo acogieron con los brazos abiertos en un momento de crisis personal, Benny Moré, trajo a su orquesta gigante, y antes de una presentación oficial en La Habana, lo hizo en el cabaret San Pedro del Mar, donde actuó hasta bien entrada la madrugada.

Una joya santiaguera

San Pedro es parte inseparable de la vida nocturna de la ciudad, donde nacionales y foráneos llegan hasta este mirador a disfrutar de la buena música, el baile y su reconocida coctelería acompañada de la oferta culinaria.

Desde 1950, su show se concibe pensando en las tradiciones santiagueras y afrocubanas, combina la música internacional y medios audiovisuales para el disfrute de quienes optan por visitarlo; actualmente pertenece al Grupo Extrahotelero Palmares.

El cabaret de fama mundial atesora un rico historial artístico, donde grandes intérpretes de la música cubana y orquestas de renombre lo han prestigiado con su actuación.

Un área preferida por muchos, es el Bar de los Recuerdos, un lugar que se convierte en confidente de amores prohibidos y escapadas silenciosas, que ha abierto sus puertas a artistas de la talla de la vedette Rosita Fornés, y a la insuperable Rita Montaner.

También guarda el recuerdo de la visita de figuras como Elena Burke, Omara Portuondo, Farah María, Miguel Ángel Piña y Oscar D’León, entre otros muchos que vivieron momentos inolvidables en este íntimo y acogedor lugar.

Desde hace algún tiempo es el escenario del espectáculo de Locomoción y Malaika, dedicado principalmente a la juventud.

San Pedro por dentro

Este centro nocturno tiene capacidad para más de 250 personas, y brinda servicios en el horario de 10:00 p.m. hasta las 3:00 p.m., donde se pueden disfrutar de sus diferentes espacios, además del Bar de los Recuerdos, está la parrillada, el servi-bar, y el Salón General.

También alquilan el local para celebrar fiestas, bodas, quince, actividades de centros laborales, que actualmente se cobra en moneda nacional con precios asequibles.

Un sello que lo distingue desde sus inicios son los espectáculos caribeños con la música autentica de la zona oriental del país, cargados de costumbrismo santiaguero con sones, pregones y boleros, rodeados de un ambiente romántico y privado.

Se recuerdan show como Fantasía Tropical, Iré a Santiago, Caribeña, Calor en Santiago, Mulata, Santiago Soy, Fantástico, que hicieron del deleite de los clientes.

Otra de las propuestas de esta añeja, pero renovada instalación, es su balcón, desde donde el visitante puede apreciar la belleza de la bahía santiaguera y sus alrededores.

Enfrascado en el rescate de San Pedro del Mar, proponen a los que gustan del espectáculo de cabaret un nuevo show, que tiene que ver mucho con la vida santiaguera, Fiesta del Caribe, que responde al nombre que lleva y a Santiago como su capital, con alrededor de una hora y veinte minutos de duración, donde también participan tres solistas del patio.

El colectivo artístico y los trabajadores en general aspiran a que por su calidad, pueda ser comercializado en las diferentes Agencias de Viaje como destino turístico; además esperan que los santiagueros retomen esa antigua tradición de ir a San Pedro del Mar, por lo que siempre fue, escenario de coreografías, luces y buen gusto por lo estético, acompañado de una excelente gastronomía basada principalmente en diferentes platos de la comida criolla.